miércoles, 12 de septiembre de 2012

Julio con J de Joder.

"Venga, vuelve a hacerlo, no vales para más, ya lo demostraste"  me sigo repitiendo con las cuchillas en las mano, apretadas, creando yagas en las palmas, sollozando, tengo dos opciones seguir con el sufrimiento o dejarme acabar con todo. Como siempre elijo sufrir, llega el primer corte ya todo lo demás surge solo "¿Cómo me hizo eso?" Me pregunto, ya ni miro, las hago en cualquier sitio, las caderas, la ingle, las rodillas. Grito en silencio "¿de qué me sirvió?¿de qué le sirvió?" Vuelvo a cortar, esta vez más profundo. Seguir atormentándome por el pasado no debe de ser bueno y sus borderías que no ayudan "Sigue ¿ya qué más da?", empiezas a sentir dolor. Me torturo y ahora ya no es psicológico, ahora la tortura es física, me golpeo con todo lo que puedo "Antes no eras así ¿qué ha hecho contigo?", cabeceo y me dejo caer sobre la cama, rendida, desmayada, llevo días sin comer, llevo días sin vivir. No paro de darle vueltas a todo "¿será el karma?" me empiezo a preguntar. Llantos diarios y suplicas por una vuelta que no llega. Ya no sé que más hacer, si todo lo que hago parece estar mal y por desgracia a ella no la puedo odiar. Ella sigue con su vida, es feliz, me consuelo con ello, no sé porqué pero así es. Sufro por vivir y me ahogo en mi propio silencio "¿por qué no terminar con todo?", el balcón abierto y mi mente me hace explotar, me levanto del sofá y me asomo a mirar, nadie pasa, es ahora o nunca. Me subo a la barandilla y me dispongo a saltar, aparece mi madre por detrás "¿Qué haces? Sal ya", no sé como he llegado a esto, no sé como ella me ha llevado a esto, me seca las lágrimas y me comienza a abrazar, me dice que soy joven, que se va a pasar. Lo sé "soy una cría" me repito y empiezo a aparentar normalidad. Empiezo a confiar en que todo va a mejorar pero "Mírate, das asco, normal que no te quiera" y empezar a vomitar, ni siquiera necesito forzarme, la comida me da asco, no la puedo ni tocar. Cortes, vómitos, llantos... Todo un paraíso. Ya no puedo ni sostenerme en pie, el equilibrio me falla, me desmayo, ni siquiera me levanto de la cama. Mi madre obligándome a salir y yo que no puedo ni caminar. Por las noches parece que estoy mejor así que me dedico a meterme en la ducha con agua fría y salir a pasear, la una, las dos, las tres, las cuatro, las cinco. Se me pasa la noche vomitando en cualquier parque cual borracha habitual. Empiezo a adelgazar, las ojeras, las marcas, todo se me empieza a notar, mi máscara de normalidad se cae, todos sospechan, me comienzan a vigilar "¿Cómo salgo de esto?", me irrito y solo me sale chillar, estar de malas y llorar. Dejo todo pasar, me apoyo en la gente, pero ni así se puede superar. Me rompió y le dio igual. Siempre le di igual, solo fui un juego más.